* Pases de muleta (Capítulo VI).

- NATURAL:

Pase que se da con la muleta en la mano izquierda y sin ayuda del estoque, que debe quedar a la espalda del diestro. Se coge la muleta con la mano izquierda, sin estoque, se busca la distancia al toro, se adelanta el engaño y cuando el toro inicia la arrancada se saca la pierna para romper la trayectoria rectilínea de la res. se deja correr la mano para mandar la embestida lo más lejos posible, teniendo en cuenta que el remate tiene que ser siempre por bajo. El pase natural suele ir rematado por el pase de pecho. Ambos, natural y de pecho, bastan por sí solos para componer una faena clásica.

Es el pase clásico por excelencia. Para que sea natural puro, debe darse totalmente aislado del estoque, que sostendrá el matador a la altura de la cadera derecha.

Apoyar el estoque, es convertir el natural en ayudado, recurso que puede admitirse en día de viento.



Es el muletazo que se instrumenta con el engaño en la mano izquierda, al torear al astado por el pitón izquierdo. La mano derecha que sostiene la espada, se suele apoyar en la cadera. En el natural se coge el palillo entre un tercio y la mitad del mismo, según tenga costumbre el diestro, ofreciéndose menor volumen de tela que en el derechazo. Su práctica se considera el toreo fundamental con la muleta.

El pase natural es el más meritorio de cuantos se realizan con la muleta. En rigor, se realiza con la mano izquierda y con todo el trapo suelto, sin el apoyo de la espada, de modo que el engaño se reduce a una mínima superficie y el toro bordea en su recorrido el muslo izquierdo del torero.

Es un pase dado con la muleta en la mano izquierda y que se suele ejecutar así: sujeta la muleta con la mano izquierda y abierta ante la cara del toro, se deja que éste la embista y al llegar a ella, extiende el diestro el brazo hacia atrás con sosiego, describiendo con los vuelos de la muleta un cuarto de círculo a la vez que se imprime a los pies el movimiento preciso para que una vez terminado el pase quede el diestro en posición de repetirlo. El pase natural es con la izquierda y se sigue discutiendo aún tras años, si se puede dar con la derecha. Se llama así, en primer lugar, porque se manda al toro hacia el mismo lado cuya mano tiene la muleta el torero. Es decir, que se da salida al animal por el lado natural o normal, dada la posición de toro y torero.
La base fundamental para que se llame así es que el torero no debe ayudarse con la espada y es pilar fundamental de toda la faena de muleta, y en la evolución seguida hasta pasar del toreo como expresión de lucha, combate y en cierto modo caza del toro, al noble juego de armonía, ritmo y plasticidad que es hoy el arte de torear, ha seguido los mismos avatares de las restantes suertes.

Según Manolete: "el pase natural puede considerarse como el eje de la faena de muleta... Para mí, para mi modesto criterio, entiendo que debe darse así: en el toro que embiste no se le debe adelantar la muleta, sino dejar llegar al toro hasta que los pitones llegan a una distancia como de una cuarta de la muleta. Cuando el toro está a esta distancia, entonces se le debe correr la mano con la máxima lentitud y estirar el brazo todo lo que se pueda; la pierna izquierda tiene que quedarse completamente inmóvil y cuando el pase llega a su terminación es entonces cuando hay que girar con la pierna derecha hasta quedar en la posición de darle el siguiente muletazo en el mismo terreno en que se inició el primero y, así, sucesivamente, dar todos los que se puedan..., o deje dar el toro".

Es un pase en que el diestro despide al toro por el mismo lado de la mano en que tiene la muleta. La mayoría de historiadores ha considerado natural al pase que se da con la izquierda, debido a que era natural tener la muleta en dicha mano para sostener la espada con la derecha. Pepe Hillo y “Paquiro” lo llaman “regular”.

El torero cita al toro echándole la muleta, mientras adelanta la pierna contraria, dando el pecho o medio pecho. Al toro se le lleva toreado lo mas atrás posible, para dar tiempo a colocarse para el siguiente natural, alargando la embestida lo más que se pueda. La mano derecha, que coge la espada, debe apoyarse en la cadera, si bien muchos toreros prefieren dejarla suelta, al costado. Toreros hay que han ejecutado este pase con ambas rodillas en tierra e, incluso, aunque ya en desuso, con una rodilla en tierra.

Puede ejecutarse indistintamente con ambas manos, en los dos casos sin ayuda de la espada. Es mucho mas frecuente y clásico el que se realiza con la mano izquierda. Joselito Arroyo puso en práctica ese natural con la derecha.

El natural con la derecha.- Consiste en ejecutar el pase natural cogiendo la muleta con la mano derecha, sin ayuda de la espada, que puede quedar o no en la mano izquierda.

Natural de frente a pies juntos.-

El torero se coloca de frente, con los pies juntos, dando el pecho completamente por su postura frente al toro. La suerte en este caso se carga con el pecho, con la cintura y los brazos. Al toro se le echa la muleta a los hocicos, se le lleva toreando todo lo que permita el cuerpo; el viaje será menor que en el natural, lógicamente, y se le despide con un suave giro de muñeca y de cintura. Al toro se le vacía detrás de la cintura y debe lograrse que el animal se enrosque en el cuerpo del torero, describiendo un semicírculo. Manolo Vázquez resucitó hace unos años este tipo de natural de frente a pies juntos.

- NORIA (Pase de la):
Se ejecuta girando rápidamente el torero, pegándose a los cuartos traseros de la res.

- ORTINA:
Invento de Miguel Ortas. Es gemela a la MANOLETINA, pero por el otro pitón, y sujetando la muleta con una mano.
Es una derivación de la Arrucina. La diferencia está en que la arrucina empieza con un derechazo y la ortina comienza prescindiendo del derechazo.

...continúa en el capítulo VII...